Una puerta que se cierra antes de tiempo, un roce con una columna al maniobrar, un pequeño choque con el vehículo del vecino al aparcar… Existen muchas situaciones en las que podemos dañar nuestro vehículo, aun cuando pensamos que ya está a salvo dentro del garaje. En este artículo analizamos varias de ellas para ver si cubre el seguro un golpe en el garaje o si no.
Para empezar, debemos especificar que, a la hora de ver si un seguro cubre el siniestro, debemos analizar dos cosas: las coberturas de nuestro seguro de coche y, lo que es más importante, la responsabilidad del siniestro. Dependiendo de quién sea el culpable del golpe, entrará en juego uno u otro seguro.
Si la responsabilidad del golpe en el garaje ha sido tuya, porque ibas despistado o has maniobrado mal, tu seguro de autos puede cubrir el desperfecto en tu coche si has contratado la cobertura de daños propios.
La cobertura de daños propios está incluida en los seguros a todo riesgo, y es lo que los diferencia de los seguros a terceros, ya que estos últimos se limitan a cubrir los daños que podamos causar a otras personas o vehículos.
Así, si tienes un seguro que cubre los daños propios, estarás cubierto en esta situación. Si lo has contratado con franquicia, deberás abonar la cantidad pactada a la hora de dar el parte. Si lo has contratado sin franquicia, no deberás pagar nada.
Si te has chocado con otro vehículo en el garaje y la responsabilidad es tuya, aquí entra en juego la cobertura de responsabilidad civil, una cobertura obligatoria que tienen todos los seguros y que se encarga de indemnizar a otras personas por los daños y perjuicios personales o materiales que el asegurado pueda ocasionar.
La cobertura de responsabilidad civil no funciona con franquicias, y se encargará de las reparaciones necesarias en el vehículo del otro conductor (hasta el límite cubierto en la póliza).
Eso sí, la responsabilidad civil funciona siempre que el vehículo dañado sea de una tercera persona ajena a la familia. Si la mala suerte se ha cebado contigo y has dañado otro coche de tu propiedad o el de un familiar, la responsabilidad civil deja fuera tanto a los bienes del tomador del seguro como del cónyuge o los parientes hasta el tercer grado de consanguinidad o afinidad de los anteriores. Esto se hace para evitar riesgos de fraude.
Si has golpeado la puerta del garaje y has causado un daño en la estructura, las coberturas de responsabilidad civil de tu seguro de coche podrían cubrir la reparación, si se trata de un garaje comunitario, ya que todos los propietarios de una comunidad de vecinos son considerados como “terceros” en los siniestros de responsabilidad civil.
Si se trata de un golpe en tu propio garaje, causado por ti, el seguro de auto no incluye esta cobertura. Eso sí, no está de más revisar la póliza de tu seguro de hogar por si ofrece coberturas al respecto.
Si la responsabilidad del golpe en el garaje no es tuya, pero tu coche ha sido el perjudicado, la responsabilidad de indemnizar es de la compañía aseguradora del coche causante del siniestro.
Mediante tu cobertura de reclamación de daños, tu compañía aseguradora se encargará de realizar todos los trámites pertinentes para recibir una indemnización que repare los daños en tu vehículo, a abonar por la compañía aseguradora del coche responsable del siniestro. Por este motivo, es esencial conocer quién ha causado el golpe.
También estarás cubierto si el causante no se ha podido identificar, pero cuentas en tu póliza con la cobertura de daños propios.
La puerta del garaje falla y golpea mi coche, ¿quién lo cubre?
Un fallo repentino y accidental en el funcionamiento del motor o de los sensores o células fotoeléctricas del garaje puede hacer que la puerta falle y golpee tu vehículo. Normalmente, esta situación requiere de la intervención de peritos que averiguar cómo han sucedido los hechos.
Si, efectivamente, la puerta ha fallado, los daños causados están cubiertos por el seguro de la comunidad de vecinos, concretamente, por la cobertura de responsabilidad civil..
Si se trata de un garaje privado, tendrías que recurrir a la cobertura de daños propios de tu póliza de coche, de la que te hemos hablado antes.
Por pequeño que sea, un accidente en el garaje que dañe la pintura o la chapa de tu coche puede acarrear reparaciones costosas. Por eso, contar con la cobertura más completa para tu coche puede salvarte cuando tienes un golpe en el garaje.
Si necesitas asesoramiento para contratar la mejor cobertura para tu vehículo, puedes localizar tu oficina o agente Ges más cercano y estaremos encantados de ayudarte.