Nos guste o no, los accidentes ocurren. Son algo que no se ve venir; y que no podemos evitar. Los accidentes escapan a nuestro control pero, ante ellos, sí podemos contar con un recurso que nos ayuda a paliar algunas de sus consecuencias: un seguro de accidentes personales.

Un seguro de accidentes no puede evitar que tengamos un accidente, pero puede aliviar algunas de sus consecuencias, aportando una suma de dinero al asegurado y/o a su familia para evitar las repercusiones económicas del accidente. Así, protege en casos de:

  • Fallecimiento: En este caso, se paga un capital prefijado a la familia o a los beneficiarios.
  • Incapacidad permanente: En este supuesto, el accidentado recibe una indemnización, según el capital acordado en la póliza.
  • Incapacidad temporal: En muchas ocasiones, los seguros de accidentes personales aportan una indemnización diaria en casos de incapacidad temporal, mientras dura el tiempo de curación o rehabilitación y siempre dentro de los límites fijados por la póliza.

 

Las ventajas de un seguro de accidentes personales

 

1. Te protege en un momento de vulnerabilidad. Aporta seguridad económica ante un imprevisto de este calibre, que podría detener la actividad económica del accidentado y, por tanto, ponerse a él mismo o a su familia en una situación difícil.

2. Responde ante accidentes graves o leves. No hace falta ponerse en lo peor. Cualquier accidente, aunque sea leve, puede tener repercusiones en el proyecto de vida y en el futuro de una persona.


3. Es un seguro flexible. Estos tipos de seguros suelen ser muy flexibles para que puedas incorporar las coberturas que necesitas. Tu agente de seguros puede asesorarte para que contrates los capitales adecuados y coberturas adicionales, como la asistencia en viajes o el adelanto para gastos del sepelio o pago del Impuesto de Sucesiones, que también pueden ser útiles en caso de accidente.

4. Ofrece asistencia sanitaria ante un accidente.

5. Facilidades para incorporar a la familia. Un seguro de accidentes de familia, con dos o más miembros, puede aportar ventajas extra.

6. Resulta más económico que otros tipos de seguros, como los seguros de vida. Por este motivo, puede ser un seguro perfecto para ti si cuentas con un determinado perfil. Tu agente de seguros sabrá aconsejarte sobre qué seguro es el más adecuado para tu caso particular.

7. No suele contar con período de carencia. La protección comienza en el momento en el que comienzas a pagar el seguro.

 


¿Qué se considera un accidente?

 

Cuando se piensa en accidente, lo primero que suele venir a la cabeza es un accidente de circulación, pero un seguro de accidentes personales no se limita a esto: cubre todos los accidentes que puede sufrir el asegurado en su vida personal y laboral.

Pero, ¿qué se considera un accidente? Según la Ley 50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro, se entiende por accidente la lesión corporal que deriva de una causa violenta súbita, externa y ajena a la intencionalidad del asegurado, que produzca invalidez temporal o permanente o muerte.

El concepto de accidente es muy importante para diferenciar el seguro de vida de un seguro de accidentes: el seguro de vida cubre muerte o incapacidad en cualquier caso, por ejemplo, en caso de enfermedad. En cambio, el seguro de accidentes personales responde solo si la muerte o invalidez deriva de un accidente, como bien indica su nombre. Únicamente cubriría enfermedades si éstas son una consecuencia directa del accidente.

Pueden ser accidentes un atropello, una caída, un golpe de un objeto o un siniestro en un medio de transporte, por poner algunos ejemplos, siempre que el asegurado no lo provoque intencionalmente. Habitualmente, cuando contratas este seguro, tu póliza especificará las condiciones que debe tener el accidente para que la compañía aseguradora te indemnice.

 

¿Quién necesita un seguro de accidentes personales?

 

Un resbalón en la bañera o un tropiezo en las escaleras son accidentes comunes que no suelen tener un final trágico, pero que pueden dar lugar a una pierna escayolada, y por tanto, a que la persona asegurada tenga que interrumpir su actividad laboral. 

Por este motivo, los seguros de accidentes son muy demandados por los trabajadores por cuenta propia, ya que la cantidad que cobran de baja laboral es bastante limitada, sobre todo si cotizan por la base mínima, y necesitan de una ayuda adicional para mantener sus ingresos.

Pero hay muchos más perfiles de personas que pueden estar interesadas en un seguro de accidentes personales. Por ejemplo, una persona joven sin problemas de salud, pero que por su estilo de vida está muy expuesta a accidentes (por ejemplo, porque viaja mucho), puede preferir este tipo de seguro a uno de salud o incluso de vida.

Si alguna vez te has preguntado qué pasaría con tu vida o con tu familia si tuvieses un accidente, quizás deberías considerar un seguro de accidentes personales. En ese caso, puedes ponerte en contacto con uno de nuestros agentes para recibir un asesoramiento personalizado.

 

Cómo el seguro de vida potencia tu bienestar personal