El número de póliza no es algo que las personas suelan tener en mente. Sin embargo, es una de las primeras cosas que debes comunicar en algunas situaciones de urgencia, por ejemplo, si tu vehículo te deja tirado y cuentas con un servicio de asistencia en carretera.

Por este motivo, aunque no tienes que memorizar tu número de póliza, sí es conveniente que lo tengas a mano en el momento preciso, o que aprendas a localizarlo, y que sepas en qué situaciones pueden pedírtelo ¡Te lo contamos!

 

¿Qué es el número de póliza?

 

El número de póliza es un código alfanumérico único que identifica tu póliza, es decir, una combinación de números y letras que permite localizarla, como un DNI de tu seguro.

Cuando tienes un siniestro o quieres consultar algo con tu compañía aseguradora, una de las primeras cosas que te van a solicitar es tu número de póliza, ya que esto les permitirá saber inmediatamente las coberturas que tienes y conocer todos los pormenores del contrato.

 

¿Es lo mismo una póliza de seguros que el contrato?

 

Si estás buscando tu número de póliza y encuentras un documento que parece una póliza pero no lo contiene… quizás estés mirando el contrato de seguro. 

La póliza de seguro y el contrato de seguro están regulados por la Ley 50/1980 de Contrato de Seguro y están muy relacionados entre sí, de manera que a veces los términos se usan indistintamente, pero en la práctica no son sinónimos. 

En términos sencillos, el contrato es el acuerdo con tu compañía aseguradora, mientras que la póliza es el documento que ratifica el acuerdo y que además incluye todas las condiciones y cláusulas acordadas, las fechas de vigor y vencimiento del seguro y otros datos importantes, como el número de póliza.

 

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¿Dónde encontrar tu número de póliza?

 

No hace falta que emplees recursos de tu cerebro en memorizar los números de tus pólizas. Con saber dónde encontrarlos, es suficiente.

La opción más fácil es mirar el documento de tu póliza. Aunque el formato de las pólizas varía entre compañías aseguradoras, lo más habitual es que se sitúe en un lugar destacado para que lo encuentres de un solo vistazo.

Quizás estés pensando, ¿y si no encuentro la póliza de mi seguro? Si no tienes la documentación a mano, tienes algunas opciones más:

  • En el área de cliente de tu compañía aseguradora.
  • Llamando a atención al cliente de tu compañía aseguradora. En este caso, tendrás que proporcionar datos alternativos, como nombre, DNI, fecha de nacimiento, etc.
  • Poniéndote en contacto con tu agente de seguros. Si quieres comunicar un siniestro no urgente, tu agente incluso puede ejercer de mediador en la gestión. 
  • En el caso de algunas entidades bancarias, puedes encontrar el número de póliza en el extracto de los recibos, pero no todas ofrecen la misma información.

 

¿Debo llevar siempre la póliza encima para saber el número?

 

Esta duda suele surgir a menudo cuando se habla de las pólizas de seguros que entran habitualmente en juego cuando estás fuera de casa, como es el caso de los seguros de vehículos.

Legalmente, ya no es obligatorio llevar la póliza en tu coche (ni el último recibo de pago del seguro), ya que los agentes pueden comprobar si está asegurado consultando el Fichero Informativo de Vehículos Asegurados (FIVA), una base de datos de vehículos asegurados a la que únicamente tienen acceso algunos organismos públicos y privados, como las estaciones de ITV.

Sin embargo, sigue siendo recomendable llevar una copia de la póliza en el coche, o al menos llevar apuntado el número. De este modo, no tendrás problemas para cubrir la declaración amistosa de accidente, si te ves involucrado en algún siniestro, o para comunicarte rápidamente con el servicio de asistencia en carretera

Esperamos que con esta información hayas aprendido más sobre el número de póliza, su función y cómo localizarlo rápidamente.