El seguro colectivo para trabajadores es una opción cada vez más popular entre las empresas que buscan ofrecer beneficios adicionales a sus empleados y asegurarse de que cuentan con una protección adicional en caso de accidentes, enfermedades o fallecimiento. En este artículo, examinaremos las ventajas de contratar un seguro para colectivos, las clases más habituales de pólizas y cuándo contratarlas.
Los seguros colectivos son una modalidad de seguro que permite amparar, a través de una misma póliza, a varias personas que tienen algo en común, como que trabajan en la misma empresa.
En general, es la empresa quien paga el coste del seguro de sus trabajadores, aunque en algunos casos los empleados también pueden contribuir a la prima. De hecho, puede incluirse dentro de un plan de retribución flexible como salario en especie, una modalidad que permite que los empleados accedan a beneficios fiscales.
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Existen dos tipos de seguro colectivo que las empresas pueden ofrecer a sus empleados. En el primero, conocido como "abierto", la empresa simplemente abre una póliza de seguro colectiva y la ofrece a la plantilla. Los empleados tienen la opción de aceptar o rechazar la oferta. En este caso, el importe de la prima se descuenta del salario del empleado, total o parcialmente, a través de un sistema de retribución flexible.
En el segundo tipo, denominado "seguro colectivo cerrado", es la empresa quien se encarga de contratar el seguro para todos los trabajadores. En este caso, corre a cargo de la compañía y el coste de la prima no es repercutido a los empleados.
Ambos tipos de seguro colectivo tienen repercusiones fiscales diferentes, por lo que es importante que la empresa evalúe cuál se adapta mejor a sus necesidades. En cualquier caso, cualquiera de las dos modalidades es una buena opción para ofrecer un beneficio adicional a los empleados y mejorar su satisfacción con la empresa.
1. Seguros de vida. Ofrecen a los empleados y a sus familias una compensación que ayudará a que mantengan el bienestar económico en caso de fallecimiento, incapacidad absoluta y permanente para cualquier trabajo o de incapacidad profesional total y permanente para la profesión habitual. De este modo, los empleados tendrán la tranquilidad de que la familia contará con un apoyo económico para hacer frente a los gastos durante un tiempo, si llega a tener lugar una situación en la no puedan continuar aportando a la economía familiar.
2. Seguros de accidentes. Ofrecen una compensación económica a los empleados en caso de incapacidad absoluta y permanente por accidente, o a sus familias, en caso de un fallecimiento por la misma causa. También pueden ofrecer una indemnización diaria, en caso de incapacidad temporal, o cubrir los servicios de asistencia sanitaria en caso de siniestro.
3. Seguros de salud. Es uno de los seguros más valorados por los trabajadores. Garantiza su bienestar dando acceso a centros médicos y especialistas de la medicina privada, así como a otros servicios como orientación médica telefónica 24 horas, consejo psicológico telefónico, segunda opinión médica internacional, etc. Además, los seguros colectivos de salud ofrecen a los empleados la libertad de elegir su médico y horario de consulta de acuerdo a sus necesidades y preferencias, lo que se traduce en una atención más rápida y eficiente.
En algunos sectores profesionales es obligatorio contar con un seguro colectivo para trabajadores. Para saber si tu empresa es una de ellas, debes consultar el convenio colectivo que la rige, que también establecerá las garantías o los capitales que tiene que ofrecer la póliza. En todo caso, aunque no exista obligación, este seguro es una opción valiosa para cualquier empresa que desee ofrecer beneficios adicionales a sus empleados y conseguir retener al mejor talento.
Si estás considerando la opción de ofrecer este seguro a tus empleados, es importante encontrar una opción que se ajuste a tu empresa. Un agente de seguros puede ofrecerte asesoramiento y orientarte sobre las mejores maneras de proteger a los activos más importantes de tu compañía.