Los colores, materiales y muebles que conforman una estancia pueden transmitirnos confort, armonía y bienestar. Sin embargo, un siniestro inesperado puede echar a perder toda la dimensión estética que tanto nos hemos esforzado en crear. La cobertura de daños estéticos de tu seguro puede proteger la imagen de tu hogar. En este post, te contamos cómo.
Se trata de una cobertura que podrás contratar de manera opcional en la mayoría de los seguros de hogar, y que también puedes encontrar bajo el nombre de cobertura de “restauración estética” o “recomposición estética”.
Esta cobertura vela por la estética del hogar, ocupándose de la reparación (u ofreciendo una indemnización para ésta) de las estancias que han visto su imagen alterada, a causa de un siniestro cubierto en la póliza y hasta el límite recogido en ésta.
Para que sea más sencillo de entender, te lo explicamos con un ejemplo. Imagina que una fuga de agua estropea parte de tu suelo de madera: tu póliza se encargará de la reparación de la tubería y de los daños ocasionados por el agua, pero solo en la zona directamente afectada por el siniestro. Sin embargo, puede que cambiar solo una parte del suelo estropee la estética del hogar, ya que la nueva madera no se consigue integrar con el resto. En este caso, la cobertura de daños estéticos de tu seguro de hogar puede hacer que se cambie la totalidad de la superficie, cuando no queda igualada o existe un contraste en los materiales que daña la estética.
Piensa ahora en lo que ocurre si un pequeño incendio quema algunos armarios en tu cocina. El seguro de tu hogar debe sustituirlos, ya que se trata de daños garantizados bajo la cobertura de incendios. Pero, ¿y si no hay a la venta armarios iguales o similares a los que han sobrevivido al siniestro? Para respetar la uniformidad, será preciso cambiar todos, también los que han quedado intactos. La cobertura de daños estéticos puede lograrlo.
Así, gracias a la cobertura de daños estéticos, no solo estará cubierta la reparación o sustitución de los bienes afectados, sino también la sustitución de los bienes no afectados, cuando no es posible efectuar la reparación con materiales idénticos o similares a los estropeados y, por tanto, se rompe la armonía del conjunto.
Para saberlo con certeza, deberás leer el condicionado general de tu póliza o preguntar a tu agente de seguros, pero lo cierto es que muchas pólizas cubren los daños estéticos que se dan tanto en el continente como en el contenido.
Es necesario recordar que esta cobertura solo entra en acción cuando los daños han sido consecuencia de una contingencia previa, cubierta en la póliza. Una vez se comunica el siniestro principal y se efectúan las reparaciones más urgentes, entra en acción esta cobertura.
Como puedes ver, la cobertura de daños estéticos vela por que tu hogar mantenga una estética cuidada, haciendo que una reparación puntual no la estropee. Sin embargo, hay ciertos aspectos que se quedan fuera de esta garantía:
Esperamos que ahora tengas más claro qué son los daños estéticos en el seguro de hogar. Si buscas una póliza que te ofrezca la mejor protección para tu hogar y que incluya esta cobertura, un agente Ges puede resolver todas tus dudas y ofrecerte un presupuesto sin ningún compromiso.