Saber cuánto cuesta un seguro de hogar no es tan sencillo. A la hora de calcular su coste, hay que tener en cuenta tantos factores que se hace prácticamente imposible establecer un precio medio para los seguros de hogar en España.
La prima a pagar se calcula en función de la probabilidad de que el hogar sufra algún siniestro y del precio que tendría que abonar la compañía aseguradora en esa situación. Esto, a su vez, viene determinado por las características de la vivienda.
Por esta razón, las compañías aseguradoras deben elaborar sus presupuestos de pólizas del hogar para una vivienda de características concretas. Solo aportando los datos de tu vivienda podrás saber cuánto cuesta un seguro para tu hogar y compararlo con otros presupuestos, siempre teniendo en cuenta que las diferentes pólizas pueden ofrecer diferentes niveles de protección.
¿Qué determina cuánto cuesta un seguro de hogar?
Los principales factores que determinan cuánto cuesta un seguro de hogar son el valor asegurado del continente y del contenido. A mayor valor asegurado, más alta será la prima.
En primer lugar, debes saber que el continente está formado por las paredes, ventanas, suelos y, en definitiva, toda la estructura de la vivienda, mientras que el contenido abarca lo que se encuentra en su interior (electrodomésticos, ropa, muebles…).
El capital por el que se asegura el continente debe ser la cantidad que costaría reconstruir la vivienda en caso de destrucción total, así que no se incluye el valor del suelo (ya que no se destruye). De este modo, para calcular el valor del continente hay que multiplicar los metros cuadrados de la vivienda por el coste de construcción por metro cuadrado.
Sin embargo, el cálculo no es tan sencillo como podría parecer: para saber el coste de contrucción es necesario tener en cuenta aspectos como el tipo de vivienda, la calidad de la construcción, los materiales empleados o posibles reformas que se hayan efectuado en la vivienda. También debes computar otras superficies que forman parte de ella, como el garaje o los trasteros.
Por otro lado, es necesario establecer el valor asegurado del contenido. Para ello, deberás hacer una especie de inventario sobre todo lo que hay en tu hogar. Habitualmente, las compañías aseguradoras disponen de ciertas tablas para calcular los valores.
En caso de guardar en el hogar objetos de valor especial, como obras de arte o joyas, debes notificarlo a la compañía aseguradora, quien podría recurrir a la tasación de un perito para evaluar estos bienes.
Una valoración ajustada del continente y del contenido es esencial para determinar el coste de un seguro de hogar y, sobre todo, para que tu vivienda esté bien protegida. Así, puedes evitar situaciones de infraseguro o sobreseguro y, por tanto, problemas con la indemnización si ocurre algún siniestro.
Más factores que influyen en el precio de un seguro de hogar
Como hemos visto en el punto anterior, los valores asegurados del contenido y el continente definen en gran medida cuánto cuesta un seguro de hogar. No obstante, hay otros factores a tener en cuenta, como los siguientes:
- Coberturas. Tal y como puedes imaginar, el coste de un seguro de hogar depende también en gran medida de si se contrata una cobertura diseñada para cubrir las necesidades básicas (incendio, responsabilidad civil, daños por agua y electricidad…) o un paquete que incluya más coberturas, como pérdida de llaves, rotura de placas vitrocerámicas, filtraciones de agua de lluvia, pérdida de bienes refrigerados, etc.
- Número de personas en el hogar. Un seguro de hogar no solo protege a la vivienda, también protege a las personas que viven en ella bajo coberturas como las de atraco fuera de la vivienda o responsabilidad civil familiar, que responde cuando la familia o las mascotas producen daños a terceros o sobre bienes de terceros. Por este motivo, un mayor número de personas en el hogar puede hacer que la prima se incremente.
- El uso de la vivienda. Se tiene en cuenta si eres propietario, es tu segunda residencia o estás de alquiler, no solo por las coberturas que puedes necesitar, que variarán según la situación (por ejemplo, si eres inquilino quizás solo te interese proteger el contenido de la vivienda), sino también por el uso que le das, ya que ésto puede influir en la probabilidad de siniestro.
- Antigüedad de la vivienda. El año de construcción y las reformas realizadas inciden en el precio de la póliza. A medida que la vivienda es más antigua, la prima tiende a aumentar porque corre más riesgo de sufrir algún desperfecto.
- Ubicación de la vivienda. El tipo de zona en la que se encuentra la vivienda (centro de la ciudad, urbanización, zona rural…) se considera para evaluar los niveles de delincuencia y la probabilidad de eventos climáticos adversos.
- Materiales de construcción. Si la vivienda está hecha con mayor proporción de materiales incombustibles, el coste del seguro tiende a ser menor debido a la reducción en la probabilidad de incendios.
- Sistemas de seguridad. La presencia de medidas de seguridad como puertas blindadas, alarmas o cajas fuertes puede disminuir el coste del seguro de hogar.
- Otras características. Factores adicionales como la altura del inmueble (piso intermedio, bajo, ático o vivienda unifamiliar…), el sistema de calefacción o la presencia de elementos como chimeneas o piscinas pueden modificar el riesgo percibido por la compañía aseguradora y, por tanto, el precio de la póliza.
En definitiva, los precios de un seguro de hogar varían mucho en función de cómo se constituya cada hogar. La multitud de factores involucrados hace que responder a la pregunta "¿cuánto cuesta un seguro de hogar?" sea un desafío.
No obstante, tú puedes averiguar fácilmente cuánto cuesta asegurar tu hogar. Solo tienes que localizar un agente de seguros cerca de ti y ponerte en contacto con él para que realice una cotización y pueda configurar un presupuesto con todas las coberturas que tu hogar necesita.